Pedimos perdón por nuestro inexcusable olvido.
Ya no sabemos de dónde salen los plátanos.
No recordamos como sembrar trigo, ni como atrapar peces, ni como manejar la lanza.
Y si supiéramos...
si recordáramos...
no nos sería útil.
Ahora somos los peces, los plátanos, el trigo...
Lo cierto es que es tan dura la realidad que poseemos que por desgracia es "la única" que tenemos y encima no sabemos cómo transformarla porque ya perdimos la memoria de cómo hacerlo. Sí, quizás sí que somos nosotros las presas de un mundo que parece darse la vuelta como un bolsillo ya vacío.
ResponderEliminarEstá realidad es dura, aunque no es exclusiva de nuestros tiempos, la foto es bastante antigua.
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